LG G4

2015 está siendo un año bastante flojo en la compañí­a coreana. LG no ha conseguido, al menos hasta el momento, reeditar el buen rendimiento que tuvo el LG G3 el año pasado. Su terminal estrella para este año LG G4 no está alcanzando las expectativas que se despertaron su lanzamiento, y es uno de los motivos por los que la compañí­a ha presentado unas cifras bastante por debajo de lo que preveí­an los analistas. Durante los meses de abril, mayo y junio la firma asiática consiguió unos beneficios de algo más de 200 millones de dólares (un 60% menos) y vio como sus ventas de móviles caí­an un 3% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta unas cifras de ventas de 14,1 millones de terminales.

La empresa coreana ha tenido un trimestre bastante flojo tanto en el campo de los smartphones como en el de los televisores. En este primer campo la compañí­a consiguió unos ingresos de 3.330 millones de dólares, una cantidad que está casi al mismo nivel que el año pasado (un 1% más). Para alcanzar estos ingresos, la firma logró vender 14,1 millones de smartphones, lo que supone un 3% menos que en el segundo trimestre de 2014. La firma explica este descenso en gran parte por la demanda más débil de los terminales de gama alta de LG en su mercado natal. Además, en general las marcas más consolidadas se están encontrando con una fuerte competencia por parte de marcas que han entrado al mercado con una estrategia muy agresiva como Xiaomi.

LG TV

Este descenso en el interés por los equipos de la gama premium ha provocado que los beneficios totales de la compañí­a caigan notablemente respecto al año pasado. En concreto, la firma consiguió unos beneficios netos de 206 millones de euros, una cantidad que está un 60% por debajo de las cifras de los meses de abril, mayo y junio de 2014. Para los siguientes meses la firma seguirá apostando por una estrategia mixta con terminales de tipo premium para hacerse fuerte en los mercados consolidados y equipos de entrada y de gama media para expandirse en los mercados emergentes.

Tampoco le ha ido demasiado bien a la compañí­a en el campo de los televisores. En este campo se consiguieron unos ingresos de 3.590 millones de dólares, una cantidad bastante débil respecto al periodo anterior. Pero además, en este campo la compañí­a experimentó pérdidas de 70 millones de dólares. El problema principal al que se está enfrentando la firma es una situación bastante adversa en las ventas de televisores LCD. Para hacer frente a esta caí­da en las ventas, LG tiene pensado centrarse de forma más especí­fica en la venta de televisores premium con resolución 4K. Además, de su comunicado oficial se puede deslizar que la compañí­a tiene pensado rebajar el precio medio de sus televisores para potenciar su atractivo en el mercado. Habrá que esperar a ver cómo se desarrollan los negocios de smartphones y teles de la compañí­a coreana.

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