El Yamaha YST-SW012 es un altavoz de graves pensado para disparar el sonido desde el frontal. Tiene forma de cubo y el cono, con un diámetro de 20 centímetros, está protegido detrás de una rejilla de tela. El recinto es sólido y está fabricado en tablero de fibra de densidad media (MDF). Es un altavoz activo, con su propio amplificador incorporado, con una potencia de 100 vatios. Cuenta con una tecnología desarrollada por la marca, llamada Advanced YST (Yamaha Active Servo Technology) que permite que el altavoz y el amplificador trabajen al unísono para cancelar la impedancia de forma que el altavoz ofrezca una respuesta lineal. Tiene un puerto de graves en un lateral.
Al ser un altavoz que integra un amplificador, genera calor durante su funcionamiento; la parte que más calienta es el panel trasero. Es aconsejable colocarlo alejado de paredes y muebles. Viene bien dejar una distancia de veinte centímetros como mínimo, tanto por los lados, como por encima y por detrás. Además es mejor evitar cubrir el panel trasero con ningún material; por ejemplo, hay que tener cuidado con las cortinas. Tampoco es buena idea colocar objetos sobre el subwoofer, ni figuritas, ni velas. Por otro lado, la respuesta de frecuencias va desde 28 a 200 Hz.
En la parte posterior tiene un indicador luminoso de corriente que muestra una luz ver cuando el interruptor está encendido. Aparte del interruptor también hay una rueda de control de volumen, que funciona en el sentido de las agujas del reloj para aumentar el nivel. El fabricante aconseja ajustar el nivel de volumen en la posición de la mitad cuando este Yamaha forma parte de un sistema de cine en casa multicanal.
Antes de usar el subwoofer por primera vez, hay que ajustar el balance entre el altavoz de graves y los altavoces frontales del sistema. Lo primero es poner la rueda de volumen al mínimo. Luego hay que encender el resto de los componentes. Después es necesario encender el interruptor del este Yamaha. A continuación hay que reproducir una fuente rica en frecuencias graves, para ajustar el control de volumen del amplificador al nivel deseado de escucha. El siguiente paso es girar la rueda de volumen lentamente para equilibrar el balance entre el subwoofer y el resto de altavoces del sistema; lo ideal es mantenerlo en un nivel donde sea prácticamente indistinguible. Finalmente, se ajusta el volumen de todo el sistema en el amplificador.
El fabricante recomienda desconectar del enchufe este altavoz antes de cambiarle de ubicación, igual que los cables de audio. Además, si no se va a utilizar durante un largo periodo de tiempo, como durante las vacaciones, conviene dejarlo desenchufado de la corriente eléctrica. Está disponible en tres colores: gris plateado, negro y una combinación de negro y naranja. Dentro del paquete hay un cable de audio con una longitud de cinco metros y cuatro almohadillas adhesivas anti-deslizantes. Cuando está encendido consume 45 vatios. Pesa 8,5 kilos y mide 290 por 290 y por 328 milímetros. El Yamaha YST-SW012 está distribuido en nuestro país a un precio de venta al público de 100 euros.
