Sony ha comunicado nuevos resultados económicos. La firma japonesa vuelve a registrar números rojos, a pesar de que se aprecia una mejora en su división de telefonía y videojuegos. Según ha informado la firma, registró unas pérdidas netas de 149 millones de euros en los primeros 9 meses de su ejercicio fiscal. Estos datos tenían que haberse publicado ya, pero la compañía ha tenido que retresarlos como consecuencia de los ataques sufridos a Sony Pictures a finales de 2014. Por su parte, Sony también ha informado que obtuvo un beneficio neto de 662 millones de euros en el tercer trimestre de su ejercicio, más del triple que en el mismo periodo del año anterior.
En lo que respecta al último trimestre de su ejercicio, la compañía nipona facturó 19.033 millones de euros, un 6% más que en 2013. Esto es debido, sobre todo a un crecimiento de las ventas en un 28,7% en el negocio de móviles y de un 16,8% en el de juegos. Todas sus divisiones han conseguido aumentar, también la de imagen, que facturó un 1,5% más, la de dispositivos, que lo hizo en un 38,6% más y la de música, gracias a la cual facturó un 13,1% más. Su división de películas es la única que no ha conseguido crecer, debido al ataque sufrido. De hecho, experimentó un retroceso del 11,7% en su cifra de negocio.
Sony tiene muchas esperanzas puestas y de cara al cierre del ejercicio espera alcanzar una cifra de negocio de 59.566 millones de euros,. Esto supone una mejora del 2,6% sobre sus anteriores previsiones de octubre y del 3% en relación con los resultados del ejercicio precedente. Aún así, espera cerrar su ejercicio fiscal con pérdidas de 1.265 millones de euros, un resultado un 32,2% por debajo del que logró en el ejercicio anterior. Este último dato no es la única mala noticia que se espera ocurra en Sony. La compañía planea prescindir de 1.000 trabajadores en su división de telefonía. Una medida que afectará, sobre todo, a empleados de fábricas situadas en China y Europa. La firma ya anunció en el pasado que recortaría 1.000 empleos, por lo que la cifra total de despidos se situaría en 2.000 personas, un 30% de su plantilla. De este modo, su división de smartphones quedaría en unos 5.000 trabajadores tras los recortes.
Parece, que a Sony le sobra y le basta con esta cifra para lanzar nuevos dispositivos. El último que preparan es precisamente el que llegará para competir con los nuevos grandes dispositivos del año. Hablamos del Xperia Z4. A pesar de que se pensaba que sería presentado en marzo en el Mobile World Congress de Barcelona, últimas informaciones que tenemos revelan que la firma esperaría al segundo o tercer trimestre del año para lanzarlo. Por lo que se sabe hasta ahora, llegaría en tres versiones diferentes, con tres tamaños de pantalla distintos, para, de este modo, poder rivalizar mejor con todos los modelos de sus competidores directos. Se espera que uno equipe una pantalla de 4,7 pulgadas, otro de 5,2 y otro de nada más y nada menos que 6,4, que entrará a formar parte del sector phablet.