Microsoft pretenden evitar que vuelva a repetirse con Windows 10 la tibia acogida que ha recibido su antecesor Windows 8. Por eso, los de Redmond quieren que toda la experiencia sea distinta con su próximo sistema operativo, y eso incluye el navegador web. Así, la compañía ha aprovechado la presentación de la versión previa de Windows 10 para adelantar cómo será su navegador de nueva generación, conocido como Proyecto Spartan. Lo está diseñado para que sea fiable, interoperable y fácil de usar, con un aspecto totalmente nuevo. Entre las nuevas características avanzadas figura la posibilidad de introducir comentarios en las páginas web ya sea mediante el teclado o usando un lápiz electrónico. Y la vista de lectura muestra el artículo en una plantilla simplificada y libre de distracciones.
El nuevo navegador va a posibilitar que los contenidos web sean accesibles tanto en línea como sin conexión a Internet. Entre las nuevas funciones también está la posibilidad de compartir contenidos de forma sencilla con los amigos. Spartan igualmente está integrado con el asistente de voz Cortana, para realizar las búsquedas y completar diversas tareas en línea mucho más rápido. Tras el anuncio oficial, algunos analistas se preguntan si el futuro navegador Spartan terminará siendo relevante para el mercado. La solución parece interesante y proporciona una nueva oportunidad a la compañía frente al veterano Internet Explorer. La cuestión es que Spartan no solamente deberá competir con Google Chrome y con Mozilla Firefox, sino también el propio Internet Explorer, que el líder mundial con más de la mitad de cuota de mercado.
El año 2014 se cerraba con una noticia relevante sobre los navegadores de Microsoft. A finales de diciembre, ZDNet adelantaba que la compañía estaba desarrollando un nuevo navegador, que no es Internet Explorer 12. Desde entonces se le conoce como proyecto Spartan. Según parece, Spartan va a usar el motor de renderización Trident de Microsoft y también el motor Chakra JavaScript de la propia casa. También se espera que Spartan esté disponible tanto para ordenadores de sobremesa y para dispositivos móviles (smartphones y tabletas) con Windows 10.
Por su parte, Neowin publicaba unos meses antes, en septiembre, que el nuevo navegador iba a parecerse un poco más a Firefox y Chrome, y que además admitiría instalar complementos. A finales de diciembre de 2014, Neowin informaba que Microsoft estaba trabajando en dos versiones distintas de navegadores, ambas basadas en Trident.
Spartan es el nombre provisional del proyecto, pero a la redacción de estas líneas aún no se sabe cuál será su nombre definitivo cuando finalmente haga su debut. Por ahora, tampoco está claro si Spartan acabará saliendo en versiones para dispositivos móviles como iOS o Android, o si acabará estando disponible para otros sistemas operativos que no sean Windows. Al fin y al cabo, últimamente, los de Redmond están desarrollando variantes de su software y de sus servicios para fuera del entorno Windows.