El diseño de este sistema de audio es bastante original y fuera de lo común. El cuerpo del Yamaha TSX-B15 está moldeado con curvas que parecen cambiar de trazado dependiendo del ángulo desde donde se mire. Por su tamaño y por su forma, es un equipo indicado para colocarlo sobre la mesilla de noche, al lado de la cama. El panel central de control está mecanizado con círculos concéntricos recubiertos de una capa de polvo de aluminio que al final presenta un acabado brillante. Es un sistema bastante simple, pero elegante y capaz, que pesa menos de un kilo y que facilita la escucha de música desde dispositivos móviles. Está disponible en cinco colores: azul, beis, blanco, rojo y verde pálido.
En el centro de la parte superior hay un reloj con dígitos formados por una luz LED roja que parecen flotar sobre la rejilla que cubre los altavoces. El reloj ofrece una función de alarma, que se puede programar para despertarse por la mañana con el tema del día favorito. Este Yamaha permite disfrutar de la música de forma inalámbrica gracias a la tecnología Bluetooth. Así, basta con emparejar este sistema con un teléfono móvil para comenzar la escucha. El Bluetooth pertenece a la versión 3.0, que es compatible con el perfil A2DP. El alcance, sin interferencias, abarca un radio de diez metros, de acuerdo con el fabricante.
Este sistema de audio de sobremesa es bastante compacto, pero dentro de su distintiva carcasa queda espacio para un sintonizador de radio en FM, que además es capaz de memorizar cinco presintonías. Si la recepción en la habitación no es demasiado buena, siempre se puede conectar una antena de radio externa utilizando la entrada correspondiente existente en la parte trasera. El Yamaha TSX-B15 tiene otra ventaja. En la parte posterior, hay un puerto USB que sirve para recargar la batería del smartphone o de la tableta mientras que están en uso durante la reproducción de música por Bluetooth. Ese USB, en cambio, no vale para reproducir audio ni desde una llave de memoria, ni desde ningún otro tipo de dispositivo. De todos modos, el usuario siempre puede utilizar la entrada de audio auxiliar para pinchar un lector de audio o un reproductor MP3 portátil; esa entrada auxiliar emplea el habitual conector minijack estéreo (3,5 mm).
La unidad incorpora dos altavoces de rango completo con conos de 5 centímetros de diámetro, que se completan con un puerto de graves, para potenciar el rendimiento en las frecuencias más bajas. El fabricante recomienda colocar el sistema sobre un superficie estable que no sea de acero ni contenga placas de metal. Conviene que el equipo se encuentre en la misma habitación que el dispositivo desde el que se pretende reproducir audio por Bluetooth. Finalmente señalar que pesa 900 gramos y sus dimensiones son 180 por 100 y por 200 milímetros. Es posible encontrar en las tiendas el Yamaha TSX-B15 a un precio de venta al público que asciende a 130 euros.
