Hay quien no puede estar quieto y nunca está contento con la apariencia que por defecto tienen sus programas favoritos. Hoy queremos prestar atención a Chrome, el navegador de Google que se ha consolidado como una de las plataformas líderes si la comparamos con Internet Explorer o el propio Firefox. La compañía de Mountain View siempre se ha caracterizado por ofrecer a los usuarios una experiencia completamente personalizable y camaleónica. Así, no es extraño que tengamos la oportunidad de customizar a placer la bandeja de entrada de nuestro correo electrónico de Gmail. Los usuarios más expertos ya saben que también tienen la oportunidad de cambiar el tema de Google Chrome de una manera ágil y sencilla. Pero es que además no cuesta ni un céntimo.
Google pone a disposición de los usuarios de este navegador un amplio surtido de temas gratuitos creados por la propia compañía, pero también por un montón de artistas que han intervenir en el diseño de Chrome. Y tú, ¿quieres cambiar el tema para darle vida a tu navegador? A continuación, te contamos cómo hacerlo en unos sencillos pasos.
1) Abre tu navegador Chrome y accede a la tienda de aplicaciones, la Chrome Web Store. Aparte de encontrar aplicaciones y juegos de distinta índole, en la parte inferior de la columna marcada en gris deberías ver un par de apartados muy específicos. Nos referimos a Extensiones y a Temas. Como puedes imaginar, bastará con que pulses sobre este segundo apartado para ver la gran cantidad de temas que puedes instalar en tu navegador.
2) Verás que Google los ha organizado en dos apartados distintos. Por un lado están los que ha creado la propia compañía. Por el otro, los que han sido diseñados por artistas. Puedes curiosear entre las distintas propuestas del catálogo y ver cuál es la que se ajusta más a tus gustos. Pulsa encima de la que hayas elegido.
3) Hay temas muy bonitos, pero también existen diseños dignos de museo de los horrores. Gustos aparte, pincha sobre el botón azul denominado Seleccionar Tema para instalarlo de manera automática. Inmediatamente después de haber dado la orden, el sistema descargará un archivo rápidamente y el tema quedará instalado en tu navegador. Puedes elegir un campo de hierba con un aspecto de lo más fresco, una pared con grafitis, un optimista cielo con sus nubes, el negro más absoluto o un diseño inspirado en grandes marcas como Dolce & Gabbana, Porsche, ígata Ruiz de la Prada o Donna Karan.
Si no queda como tú esperabas, siempre puedes cambiar de tema y seleccionar uno que realmente te guste, pueda quedar bien y además sea operativo. Y es que existen muchas propuestas con colores demasiado vivos que no facilitan la visualización de las herramientas del navegador. Por este motivo, si quieres regresar al diseño de siempre, bastará con que selecciones el tema Classic. El blanco nuclear volverá a tu pantalla y todo habrá quedado en nada.