JVC TH-LB2 es un proyector de sonido, especialmente diseñado para combinar con televisores Full HD de pantalla plana. Mide 60 centímetros de ancho y sólo 7,5 centímetros de fondo. La altura sin las patas es 11 centímetros, que aumentan a 14,8 centímetros con ellas puestas. Ofrece sonido envolvente SRS StudioSound HD, con una potencia de salida de 2 por 30 vatios.
Dentro de la caja hay instalados cuatro altavoces con refuerzo de graves; cada uno tiene un cono con un diámetro de 6,5 centímetros. Por cierto, la respuesta de frecuencias va desde 75 a 23.000 hertzios. Una de sus grandes virtudes es el conector digital para iPod o iPhone, desde el que puede reproducir audio pero también vídeo. Por eso no es de extrañar que esté disponible en dos colores (negro o blanco), aunque la rejilla que protege los conos de los altavoces es negra en ambos casos.
Esta barra de sonido de JVC tiene una entrada y una salida HDMI, que pueden funcionar aunque el aparato esté en modo de espera. A esto hay que sumar una salida de vídeo compuesto, una salida para subwoofer, una entrada de audio digital coaxial, una entrada de audio digital óptica y una entrada de audio estéreo. Pesa 3 kilos y viene acompañado de un pequeño mando a distancia.
Es compatible con los iPod Nano desde la tercera a la sexta generación (con el iPod Nano de segunda generación sólo para el audio), con el iPod Touch de la primera a la cuarta generación, con el iPod Classic, con el iPhone 4, y el iPhone 3G. A comienzos del mes de diciembre, la JVC TH-LB2 sale a la venta en el mercado japonés a un precio de 26.000 yenes (unos 250 euros).