HTC Desire y su polémica actualización a Android 2.3 Gingerbread 1

Desde ayer, los poseedores del HTC Desire pueden actualizar su móvil a la nueva versión del sistema operativo Android 2.3 de Google, más conocido como Gingerbread. La noticia parece buena para los dueños de este terminal. Pero no es así­. Y es que esta actualización no llega para todo el mundo y además lo hace con polémica y enfado para muchos usuarios.

Anteriormente, HTC anunció que estaba teniendo problemas para hacer posible la actualización en este terminal debido a las limitaciones de memoria que presenta. Ayer mismo, HTC comunicaba a través de su página en Facebook que la actualización a Android 2.3 está ya disponible para el primer modelo de la serie Desire.

Pero la actualización a Gingerbread, lejos de ser una buena noticia para los usuarios, presenta tantos inconvenientes que no será de extrañar que muchos decidan quedarse sin la nueva versión de Android.

HTC Desire y su polémica actualización a Android 2.3 Gingerbread 2

En primer lugar HTC advierte que es una actualización “recomendada para usuarios expertos que quieran vivir la experiencia Android 2.3 y que entienden las limitaciones aplicables a esta actualización de HTC Desire”. Se puede descargar al ordenador desde la página para desarrolladores de HTC, por lo que no será posible la actualización mediante el sistema Over-The Air. Un sistema de actualización automático muy cómodo que llega a través del operador.

Los usuarios más intrépidos que opten por actualizar deben tener en cuenta que en el proceso se borrarán todas las personalizaciones del teléfono. Lo que incluye mensajes de texto SMS, mails, contactos y otras informaciones personales. La interfaz HTC Sense no sobrevirirá en la actualización, como tampoco lo harán la aplicación oficial de Facebook y otras aplicaciones no especificadas que podremos volver a descargar desde su página para desarrolladores.La compañí­a sugiere que hagamos uso de algún sistema de copia de seguridad, como por ejemplo las cuentas de Google, para asegurar todos los datos que se perderán en el proceso.

Para rematar, nos advierten de que algunas funciones del teléfono, como mensajes multimedia MMS y SMS podrí­an quedar dañadas tras la actualización y se lavan las manos diciendo “HTC renuncia a la responsabilidad de cualquier función dañada. HTC renuncia a la responsabilidad de la pérdida o filtración de cualquier dato personal como resultado de la actualización de ROM”.

El proceso de actualización a Gingerbread se ha convertido en un camino lleno de obstáculos para los usuarios de HTC que esperaban con ansia esta nueva versión. Viendo el panorama no cabe duda de que muchos preferirán quedarse como están.

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