Los suscriptores de Netflix están que trinan por la última subida de precios, que entra en vigor en septiembre y afecta especialmente a los abonados que han contratado la opción que combina el alquiler de películas en streaming con los discos físicos. Los analistas interpretan las nuevas tarifas como una vía para fomentar el consumo del streaming y apuntan que la causa del incremento de precios está relacionada con la reducción de costes.
Hasta el año pasado, cuando empezó su andadura en Canadá, Netflix no se había atrevido a salir de las fronteras de Estados Unidos. Actualmente, su apuesta por el extranjero es clara, y para triunfar necesita hacerse más competitiva. Fuera de casa debe enfrentarse a dos grandes amenazas. En unos países debe combatir a competidores bien asentados, mientras que en otros debe convencer a los internautas de pagar por ver películas y series de televisión cuando están acostumbrados a las descargas P2P.
En una segunda oleada, prevista para finales de 2011, Netflix quiere conquistar cuarenta y tres países de Latinoamérica y Caribe, donde los suscriptores podrán acceder al sitio de la compañía en español, portugués o inglés, y disfrutar de películas y series de televisión en televisores conectados, ordenadores y dispositivos móviles.
El turno de Europa es la tercera oleada. Reino Unido y España serían las cabezas de puente en el continente europeo, según Variety, que hace tres días desvelaba los planes de Netflix para aterrizar en Europa durante el primer trimestre de 2012. Ocho días, antes el Presidente de FAPAE, la asociación que agrupa a los productores audiovisuales españoles, adelantaba que la compañía estadounidense había iniciado la ronda de contactos con varias productoras de nuestro país para incluir sus películas dentro de su nutrido catálogo en línea.
Hasta ahora la fórmula de distribución de cine en línea de Netflix ha conseguido tener éxito y alcanzar la cifra de 26 millones de suscriptores; antes de que concluya el año, pretende aumentar su base de clientes hasta los 30 millones de abonados.
Pues por lo que había leído en Wikipedia los de Netflix se estaban pensando muy mucho entrar en España por los elevados derechos de autor (casi el triple que en Europa).
Aunque si es cierto que van a eliminar o al menos modificar el canon digital puede ser la causa de que se interesen por nuestro mercado
"Fuera de casa debe enfrentarse a dos grandes amenazas. En unos países debe combatir a competidores bien asentados, mientras que en otros debe convencer a los internautas de pagar por ver películas y series de televisión cuando están acostumbrados a las descargas P2P."
Se te olvido mencionar la mayor de las amenazas:
"pobres anchos de banda y de paso, capados…"