La gran novedad de estas cámaras réflex de la japonesa SLT-A55 y SLT-A33 reside en el empleo de una tecnología que no aparecía en el mundillo fotográfico desde hace décadas. Se trata de los espejos translúcidos, que permiten hacer fotografías sin que haya necesidad de levantar el espejo. De esta manera, el usuario puede seguir previsualizándoe la toma de imágenes, tanto en fotografía como en video, porque si el espejo no se levanta, no obstruye la vista.
Las dos cámaras de Sony son muy parecidas tanto en el aspecto tecnológico como en el estético, y las pocas diferencias que hay entre una y otra, y que justifican una diferencia de precio de apenas unos 100 €, residen en una mayor capacidad de chip para el modelo a55, que además puede disparar más rápido que la a33. Por último, el modelo más caro incorpora GPS.
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Excelente camara, muy profesional, excelentes fotografias, el modo manual es muy bueno, asi como la prioridad a la apertura para enfoque selectivo. HDR muy bueno.
La verdad es que no veo donde está la novedad, porque en la década del 60 tuvimos las Canon Pellix, que eran de espejo translúcido y uno imagina que mejoraron. Pero si los espejos estos, tienen la misma debilidad de aquellos, estas cámaras van a tener muchos problemas con los espejos rotos o rayados por impericia al cambiar una lente o intentar limpiarlos.