El conflicto entre Google y el Gobierno chino ha dado sus frutos. Además de haber conseguido redirigir las visitas chinas al motor de búsqueda alojado en Hong Kong, Google se ha convertido durante estos días en el buscador más utilizado dentro de territorio chino. El buscador más utilizado en el país hasta ese momento, Baidu, se ha convertido en el segundo de a bordo a partir del 20 y 21 de marzo. Días que coincidieron con la publicación de distintos artículos, por parte de medios de comunicación chinos, en los que se acusaba a Google y a Estados Unidos de politizar tan peliaguda situación. Fue así como la tendencia de los internautas orientales empezó a cambiar.
Cierto es que los responsables del buscador Baidu ya se están frotando las manos ante la salida de Google. En los últimos días sus acciones no han parado de subir, en vista a la inminente marcha que el gigante americano llevaba prometiendo de un tiempo a esta parte. Al hilo del gráfico, cabe comentar que es justo en el día 22, cuando Google escapó de China para alojarse en la ex-colonia británica de Hong Kong, el momento en el que la tendencia empezó a cambiar. Los usuarios chinos de Google crecieron hasta que el día 23, las visitas a Google fueron superiores a las de Baidu. Días después de producirse este cambio, sin embargo, los usuarios chinos han regresado a su cauce para seguir utilizando Baidu como buscador de cabecera.
Baidu, el buscador más concurrido en China, tiene un nombre muy poético, inspirado en un poema del poeta clásico Xin Qiji. Aun así, su diseño (en la parte superior podéis ver una captura) es muy parecido al de Google, incluyendo la búsqueda de imágenes, noticias o canciones en formato MP3. Pasada la tormenta de los días 20 a 23 de marzo, Baidu ha recuperado parte de la cuota que le pertenecía desde que en 2005 se convirtió en el motor de búsqueda líder, al lado del actual Gobierno de Hu Jintao.
Foto de: hunxue-er
Por cada producto chino que compramos, otro europeo al paro. ¿QUIERES SER TU EL SIGUIENTE? pues sigue comprando a los chinos.