Una de las funciones del iPad de Apple es la de usar el tablet como plataforma de videojuegos. No obstante, hay voces para todos los gustos a la hora de evaluar la operatividad de este dispositivo como consola. Para unos, el iPad es la respuesta a quienes buscan un aparato multiuso que contenga una potente herramienta de ocio digital, que además está apoyada por el vasto catálogo de juegos que ya existen para el iPhone y el iPod Touch, pero en una pantalla casi tres veces mayor sin apenas pérdida de calidad. Y esa es precisamente una de las grandes ventajas del iPad a la hora de jugar: la enorme pantalla de casi diez pulgadas hace del videojuego una divertida experiencia.
No obstante, no son pocos los que no le auguran un prometedor futuro al iPad en lo que a videojuegos se refiere. Para empezar, vendría a ser la consola más cara del mercado (por encima de la Xbox 360 o la PlayStation 3). Además, resulta la plaforma más incómoda con diferencia; y es que si bien la pantalla es grande y vistosa, eso conlleva que el dispositivo resulte tosco y aparatoso para su control. Y precisamente el control protagoniza otra de las críticas: aunque el iPad tiene un acelerómetro que resultará interesante para títulos como Need for Speed, muchos de los juegos requieren el manejo mediante la interfaz táctil, que en un aparato de estas dimensiones se va a antojar muy poco confortable.
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