Nokia afronta la dura competencia de Samsung y, como la compañía coreana, la finlandesa fabrica móviles para todos los públicos, gustos y bolsillos. Lejos de la sofisticación del N900 se encuentra su última creación, el Nokia 2705 Shade. Un teléfono tipo concha de gama baja. Ligero, compacto y con prestaciones básicas para quienes gusten de un diseño atractivo sin mayores complicaciones. Se dejará ver de momento sólo por tierras estadounidenses.
El Nokia 2705 Shade estará disponible en exclusiva, al menos en principio, con la operadora Verizon. Uno de sus principales reclamos es que cuenta con carcasa intercambiable, para que los usuarios que quieran personalicen su cubierta con diferentes colores.
La pantalla interna del dispositivo, de tipo TFT, mide 2 pulgadas. Ofrece una resolución de 176 x 220 píxeles y hasta 262.144 colores. Por su parte, la pantalla secundaria externa tiene unas dimensiones de 1,36 pulgadas y una resolución de 128 x 160 píxeles. También es a color y TFT. El teclado se trata del tradicional alfanumérico. Cuenta con teclas de acceso directo a la cámara y de control de volumen en los laterales, al igual que funciones de comando de voz.
Opera bajo frecuencia CDMA a 800 y 1900 MHz. En el apartado de la conectividad, es compatible con los protocolos XHTML, HTTP, TCP e IP. Viene con Bluetooth 2.1 +EDR, que permite su uso con accesorios como kit manos libres. Incluye sintonizador A-GPS y la aplicación exclusiva de Verizon VZ Navigator. Con cables, cuenta con una salida de audio de 2,5 milímetros. En cuanto a la cámara de fotos, deja bastante que desear. Proporciona unos escasos 1,3 megapíxeles de resolución, que no se verán compensados por extras como edición del color, adaptación automática según las condiciones de luz ambiental o distintos modos de captura.
La capacidad de almacenamiento interna es de 64 Mb y nada hace pensar que pueda expandirse. Ni Nokia ni Verizon aclaran si existe una ranura para tarjetas de memoria. Su batería modelo BL-4C proporciona una autonomía que oscila entre los 300 minutos de conversación y las 360 horas en espera. Por lo demás, ofrece los servicios habituales de cualquier móvil de perfil bajo de hoy en día, como agenda, calendario, calculadora o alarma. Almacena hasta 1.000 contactos.
Sus medidas son de 8,43 x 4,32 x 1,63 centímetros y pesa 73,71 gramos. El precio del terminal es de 30 dólares, unos 20,43 euros al cambio actual. Las cubiertas, bautizadas como Xpress-On, se encuentran disponibles en color azul, rojo y púrpura. Cuestan 20 dólares, alrededor de 13 euros. En definitiva, un teléfono funcional para efectuar y recibir llamadas, sin alardes y cuyo coste se ajusta a lo que ofrece.
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