Muchos autores de ciencia ficción han insistido en que el siglo XXI supondría la llegada de los robots al hogar. Pero de momento, los únicos que lo han logrado son modelos para realizar acciones muy específicas, como la aspiradora autómata Roomba o el invento que nos ocupa en este artículo: Sony Rolly, un robot bailarín que reproduce MP3 y se mueve al ritmo de la música.
Después de probarlo en persona durante varias semanas, podemos afirmar que, en efecto, las posibilidades de movimiento de Rolly son bastante amplias. Pero por el camino Sony ha impuesto una serie de barreras que, una tras otra, van reduciendo progresivamente la amplitud del público al que este producto puede resultarle interesante.
Hablamos, por supuesto, de su precio y sus dimensiones, pero también de la dedicación que requiere conseguir bailes realmente acordes con la música, así como algunas limitaciones absurdas que la firma japonesa ha decidido imponer a Rolly con la excusa de preservar la duración de la batería. En cualquier caso, se trata de un producto que tiene su público, y sobre el que podéis saber más leyendo la revisión a fondo que acabamos de publicar en tusequipos.com.
Leer el análisis a fondo de Sony Rolly