Los espías caseros cada vez tienen más gadgets para completar la colección. Esta vez es el objeto de nuestra atención se llama Spy Pass Card. Se trata de una tarjeta de acreditación con una micro-cámara incluida, especialmente diseñada para congresistas y feriantes con vocación de espía. Basta con encenderla y colgarse la tarjeta en el cuello, para que el chisme grabe imágenes y sonido de todo lo que pasa alrededor.
Esta tarjeta identificatoria puede almacenar varias grabaciones y fotografías en sus 4 GB de memoria, consiguiendo una calidad de 352 x 288 píxeles para el vídeo y 1280 x 1024 en el caso de las fotos. La batería se carga a través de un cable USB, que ya viene incluido en el pack. Además de esto, la Spy Pass Card lleva un clip y una cinta para colgársela en el cuello, y hacer las veces de detective chapuzas.
Spy Pass Card está a la venta en la tienda de Brando, a un precio nada discreto. En total, el cachibache puede costarnos unos 136 euros. Esto, sin sumar lo que puede costar hacerse con el equipo completo del espía, con la hebilla de cinturón con cámara oculta, el CamCorder Pen o el Spy-Cellphone. Lo último en tecnología para cotillas.
Vía: Dvice