No hay nada como volver al trabajo después de las vacaciones y abrir el correo electrónico de la oficina. Por si no tienes suficiente con el síndrome post-vacacional, tienes que esperar a que se descarguen todos los emails que has recibido durante tu ausencia, revisarlos, borrar la morralla y leer sólo lo importante (es decir, menos del 5% de lo recibido). No sabemos si los programadores de Microsoft Office Labs han vivido mucho este trauma, pero en agosto lanzaron una herramienta, llamada Email Prioritizer, que permite dejar en pausa la recepción de mensajes.
Sólo funciona en ordenadores con WIndows y en Outlook 2007. Con él podemos interrumpir momentáneamente la llegada de nuevos mensajes durante un tiempo a elección (10 minutos, 30 minutos, una hora, dos horas…). Así podemos, por ejemplo, evitar que nos lleguen mensajes nuevos mientras ponemos un poco de orden con todo lo acumulado durante las vacaciones. No es la solución definitiva, porque al fin y al cabo sólo permite posponer el proceso o escalonarlo a lo largo del día. Pero también tiene una interesante opción para priorizar los correos recibidos.
Todo funciona a través de un sistema de puntuación que va de cero a tres estrellas. Cada usuario lo configura a su gusto y en función de su agenda de citas y contactos. Por ejemplo, podemos hacer que los emails enviados por nuestros jefes y aquellos en los que seamos el único destinatario tengan una puntuación de tres estrellas, para que se descarguen en primer lugar. En el siguiente escalafón pueden ir los que recibamos de contactos con los que tengamos una cita establecida durante la semana.
Y así sucesivamente, dejando en último lugar los de personas desconocidas o los mensajes en cadena enviados simultáneamente a cientos de destinatarios, entre otros tipos de emails que lo mejor que podrían hacer es irse directamente a la carpeta de Correo No Deseado. El proceso de priorización es bastante rápido, pues consigue categorizar cientos de mensajes en apenas un minuto. Eso sí, por desgracia, no impide que durante los primeros días de trabajo nos acordemos de lo bien que estábamos tomando el sol en la playa o tirados en el sofá de casa viendo los Juegos Olímpicos.
Vía: CNET News
